Los rellenos sanitarios son enormes depósitos de metano y otros recursos que pueden utilizarse inteligentemente para reducir gastos y generar energía. Sin embargo, cuando su funcionamiento es incorrecto, los desechos contaminan las aguas subterráneas, llenan la atmósfera de gases y toxinas peligrosas. Las incineradoras expulsan gases de efecto invernadero y son fuentes de metales pesados, partículas y dioxinas. Estas precarias instalaciones, los rellenos y las incineradoras envenenan el aire, el agua y el suelo.
Además, la carencia de sitios adecuados para tirar los residuos peligrosos, tales como pilas, baterías y desechos patológicos, agravan el problema, ya que estos objetos poseen un alto valor tóxico y son de uso frecuente entre la población. De esta forma, diferentes tipos de desechos son mezclados e introducidos en el entorno, causando tremendos daños a los ecosistemas.
Un caso que ejemplifica la grave situación comentada se encuentra en el corazón de la Ciudad de Mendoza. Allí existe una fuente de contaminación realmente importante: los hornos crematorios del Cementerio de Capital. Estos dispositivos despiden todos los días gases tóxicos y olores nauseabundos que afectan a los vecinos del lugar.
Este daño causado al ambiente y a la población es susceptible de ser restituido a través de políticas claras y concretas llevadas a cabo desde el gobierno y respaldadas por la ciudadanía. El compromiso de los diferentes sectores es imprescindible para lograr una gestión adecuada de los RSU.
Además, la carencia de sitios adecuados para tirar los residuos peligrosos, tales como pilas, baterías y desechos patológicos, agravan el problema, ya que estos objetos poseen un alto valor tóxico y son de uso frecuente entre la población. De esta forma, diferentes tipos de desechos son mezclados e introducidos en el entorno, causando tremendos daños a los ecosistemas.
Un caso que ejemplifica la grave situación comentada se encuentra en el corazón de la Ciudad de Mendoza. Allí existe una fuente de contaminación realmente importante: los hornos crematorios del Cementerio de Capital. Estos dispositivos despiden todos los días gases tóxicos y olores nauseabundos que afectan a los vecinos del lugar.
Este daño causado al ambiente y a la población es susceptible de ser restituido a través de políticas claras y concretas llevadas a cabo desde el gobierno y respaldadas por la ciudadanía. El compromiso de los diferentes sectores es imprescindible para lograr una gestión adecuada de los RSU.
Impacto.
Desde mediados de 2006 el problema de la contaminación que generan los hornos crematorios de Capital ocupa los titulares de los principales diarios mendocinos. Cada día un nuevo giro reconfigura el escenario y provoca más repercusiones. Por un lado, los vecinos del lugar reiteran las quejas y reclamos por las perjudiciales condiciones de vida que debían soportar.
Por otro, el gobierno sale a intentar bajar el grado de agitación social, pero sin mayor éxito. La situación se torna más preocupante con el transcurso del tiempo y la falta de soluciones concretas.
Sumado a esto, el problema de la gigantesca producción de escombros originados por el auge de la construcción agrava la proliferación de basurales clandestinos. En los departamentos de Mendoza surgen nuevos tiraderos de residuos casi todas las semanas. Las protestas de los vecinos no se hacen esperar.
Desde mediados de 2006 el problema de la contaminación que generan los hornos crematorios de Capital ocupa los titulares de los principales diarios mendocinos. Cada día un nuevo giro reconfigura el escenario y provoca más repercusiones. Por un lado, los vecinos del lugar reiteran las quejas y reclamos por las perjudiciales condiciones de vida que debían soportar.
Por otro, el gobierno sale a intentar bajar el grado de agitación social, pero sin mayor éxito. La situación se torna más preocupante con el transcurso del tiempo y la falta de soluciones concretas.
Sumado a esto, el problema de la gigantesca producción de escombros originados por el auge de la construcción agrava la proliferación de basurales clandestinos. En los departamentos de Mendoza surgen nuevos tiraderos de residuos casi todas las semanas. Las protestas de los vecinos no se hacen esperar.
Lamentablemente, la lentitud para mover el aparato estatal provoca que los conflictos alcancen puntos álgidos. Mientras los diversos factores que trastornan la calidad de vida ambiental siguen creciendo, la capacidad de resolución que posee el gobierno continúa disminuyendo.
RESIDUOS PLÁSTICOS
Algunos números…
Utilizamos 20 veces más plásticos que hacen 50 años.
56% de los residuos “plásticos” está compuesto por bolsas y envoltorios usados. De éstos, el 75% son de origen domiciliario.
400 años puede tardar el plástico en descomponerse totalmente.
800 kg. de plásticos fueron encontrados en el estómago de una ballena muerta en Normandía.
1.000.000 de bolsas de plástico se usan por minuto.
1,5 billones por día!
500 billones al año!!!
¿Sabías que…
… si se alinearan todos los vasos de plástico descartables fabricados en un día, se podría dar una vuelta completa alrededor de la Tierra? Son 12.756 km!
… muchos animales mueren ahogados al ingerir envases plásticos, ya que suelen confundirlos con alimentos?
… el contacto con agua contaminada por plásticos puede causar enfermedades?
Y en Mendoza???
El equivalente a 12.800 camiones de basura es arrojado a los cauces, siendo la gran mayoría plásticos.
40 % del agua de riego se pierde por esta causa.
¿QUÉ PODEMOS HACER?
¡Con hábitos simples, podemos contribuir a cuidar el Medio Ambiente, mejorando nuestra calidad de vida!
- SEPAREMOS los residuos entre RECICLABLES y NO RECICLABLES
- NO TIREMOS los residuos en CUALQUIER PARTE.
- APOYEMOS y FACILITEMOS el RECICLAJE.
- REUTILICEMOS los envases cada vez que sea posible.
- REDUZCAMOS el CONSUMO de ENVASES.
- NO COMPREMOS productos que contengan ENVOLTORIOS PLÁSTICOS.
TOMEMOS CONCIENCIA!!!
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