jueves, 12 de noviembre de 2009

UN PROBLEMA MUNDIAL: Pilas


La energía portátil:

Los primeros diseños de pilas, de hace más de 200 años, se fueron transformando hasta convertirse en las actuales pilas, de alta potencia y máxima duración, capaces de proporcionar energía portátil en cualquier situación y lugar.
Su gran virtud es la autonomía energética que son capaces de proporcionarnos, para utilizar desde linternas o radios hasta marcapasos para corazones. Una energía portátil para todas las ocasiones.


Una energía que nos cuesta cara:

La autonomía que las pilas nos ofrecen para utilizar una gran diversidad de aparatos en donde queramos no es gratuita. Su gran versatilidad tiene algunas contrapartidas que debemos conocer cuando las utilizamos.


Coste económico:

la electricidad que genera una pila es hasta 450 veces más cara que la que se produce en la red eléctrica.


Coste ambiental:

los componentes químicos de las pilas pueden resultar muy contaminantes si no se les da el tratamiento adecuado una vez agotadas.


Una familia complicada:

En el mercado disponemos de una gran variedad de pilas que a veces nos hace difícil escoger las más adecuadas según el uso que les queramos dar. Hagamos un intento:
Pilas botón: Su aspecto es inconfundible. Las que contienen mercurio son muy contaminantes. Las de litio, en cambio, son una alternativa interesante. ¡Un solo botón de mercurio puede contaminar toda el agua que bebería una familia de cuatro personas a lo largo de su vida!
Pilas salinas: Dentro de las pilas modernas, son las más antiguas, de cinc y carbón, utilizadas desde hace décadas. Ofrecen menos duración y potencia, pero su contenido en productos tóxicos es muy bajo. Por eso están entre las menos contaminantes.
Pilas alcalinas: Se han puesto de moda por su larga duración y potencia. Esto lo consiguen a costa de emplear mercurio, lo que las convierte en muy tóxicas. En el mercado, algunas marcas ya sustituyen el mercurio por productos no peligrosos.
Pilas verdes: Son un grupo de pilas que se fabrican sin contenido de mercurio o con una concentración muy baja. A lo mejor las reconoces con el nombre de ecopilas o biopilas. Apenas contaminan, y esta es su mayor ventaja.pilas recargables. Existe un tipo de pilas que una vez agotadas no dejan de ser útiles, por que se pueden recargar hasta 1000 veces, por lo que su ciclo de vida es muy largo. Actualmente resultan más caras y precisan de un cargador especial, pero a la larga acaban siendo rentables y más económicas.
Pilas recargables:Existe un tipo de pilas que una vez agotadas no dejan de ser útiles, por que se pueden recargar hasta 1000 veces, por lo que su ciclo de vida es muy largo. Actualmente resultan más caras y precisan de un cargador especial, pero a la larga acaban siendo rentables y más económicas.¿Y cuando se agotan...? ¿Qué les pasa a las pilas cuando son depositadas en los vertederos sin condiciones especiales para ellas? En este caso o cuando quedan abandonadas en cualquier otro lugar, con el paso del tiempo, las pilas pierden la carcasa y se vierte su contenido. Estos componentes pueden filtrarse al subsuelo y contaminar las aguas subterráneas o el propio suelo, incorporándose a las cadenas de alimento, con lo que pueden llegar de nuevo hasta nosotros.


Por eso es necesario darles un tratamiento adecuado, separándolas del ciclo habitual de los demás residuos. Compra y utiliza el tipo de pila más adecuado al aparato que vayas a usar y siempre que puedas escógelas sin mercurio ni cadmio.
Pásate a las pilas recargables. La inversión inicial la verás compensada en poco tiempo.

Reduce la cantidad de pilas que consumes. Siempre que sea posible utiliza la energía eléctrica de la red en vez de las pilas.

Hay muchos aparatos que no necesitan pilas para cumplir su función y otros que las han sustituido, por ejemplo, por pequeñas placas solares (como las calculadoras).

Nunca tires las pilas a la basura. Deposítalas en los contenedores de recogida selectiva que hay para ellas.
PENSÁ,
REFLEXIONÁ,
TOMA CONCIENCIA
CUIDÁ...
ENTRE TODOS, PODEMOS!!!